Barack Obama ha recibido esta mañana en Oslo, Noruega, el premio Nobel de la Paz en una ceremonia que  lleva creando mucha controversia e indignación alrededor de todo el mundo desde el pasado octubre, cuando se anunció a quién iba ser entregado el galardón. Todo el mundo está de acuerdo con que Obama es un hombre que ha hecho historia y que está intentando - como todos, pero él con más recursos - que este mundo sea uno mejor para todos. Pero pienso que de ahí a merecer el premio Nobel de la Paz hay un paso enorme.
El que den el premio a alguien por sus intenciones y lo que dice que va a hacer, desacredita bastante este certamen (más aun, vamos). Hechos, la gente quiere hechos, y  hasta el mismísimo Barack Obama lo ha reconocido diciendo que cree no merecer ser galardonado con un premio también recibido por Matin Luther King, Nelson Mandela, Teresa de Calcuta y hasta el Dalai Lama ( y diría más, pero mi cerebro no retuvo tanto ese día en clase...).Pero claro ¿quién es el listo que lo rechaza?
No es de extrañar, pues, que esta mañana se congregaran una gran cantidad de personas ante las puertas del recinto en el que se celebraba la ceremonia para manifestarse y pedirle al presidente Obama que demuestre que le han dado este premio por algo.

¿Qué pensáis? ¿Lo merece?